De Arbusto a Carbón: el Carbón Más Verde Viene de Namibia

Frente a condiciones climáticas extremas, los campesinos namibios han aprendido a diversificar sus actividades, en especial a través de la producción de carbón certificado FSC.

Desde hace tres años, Namibia, país de África del sur, ha pasado por una sucesión de sequías.

Namibia es un país extenso, aunque escasamente poblado, donde la agricultura es la segunda ocupación más común después de la minería. El ganado y la ganadería son las principales fuentes de ingresos agropecuarios; sin embargo, con la sequía, a los campesinos se les ha complicado encontrar zonas de pastizales y agua para su ganado.

No obstante, algunos campesinos namibios han aprendido a diversificar sus actividades y durante la temporada de secas, producen carbón.

El carbón es la salvación

Gideon Kondjeni (55) ha sido propietario de la finca Swerwerstroo durante más de 15 años.

Con 6,000 hectáreas dedicadas principalmente al ganado, su finca es como muchas otras de la región. Muy bien cercada y cerrada, la finca está ubicada a 30 kilómetros de la tranquila ciudad de Grootfontein en Namibia Central.

Con la incertidumbre que rige la cría de ganado debido a duras condiciones ambientales, tener éxito en el negocio de carbón se ha vuelto cada vez más importante.

Gideon y sus trabajadores comenzaron a producir carbón en 2017.
El carbón se fabrica a partir del aprovechamiento de arbustos que invaden la sabana. Estos arbustos son, a menudo, arbustos de espinas y especies de árboles invasoras. Se consideran indeseables debido a su rápida expansión y a los efectos negativos en los ecosistemas locales, impactando negativamente la biodiversidad, amenazando a las especies y absorbiendo la escasa agua subterránea. Para producir carbón, la cuadrilla de Gideon aprovecha y corta los arbustos para quemarlos en hornos durante horas y convertirlos en carbón.

La producción de carbón ayuda a limpiar de arbustos. Esto ayuda a restaurar los ecosistemas del área que han sido afectados por generaciones de actividades humanas.

La Certificación FSC asegura una producción responsable de carbón FSC

Hace cuatro meses, Gideon decidió iniciar el proceso de certificación FSC y se unió al esquema grupal CARBO Namibia, el cual ayuda a unos 20 campesinos a obtener la certificación FSC. De esta manera, Gideon está seguro de que su carbón FSC se venderá directamente a CARBO, garantizándole a él y a sus trabajadores un ingreso constante.

Gideon se está preparando para su primera auditoría, la cual espera concluirá con su certificación FSC de manejo forestal.

Frank Detering, director de certificación de CARBO Namibia, está ayudando a Gideon y a otros campesinos locales a prepararse para su certificación FSC.

La certificación FSC: un sistema estricto

Cuando el vehículo de Frank entra a la finca de Gideon para una inspección, la tensión en la cara de Gideon es evidente. A pesar de que la auditoría en sí no se realizará el día de hoy, para Gideon, éste es aún así, un día importante.

Lo primero que hace Frank después de verificar el mapa de la finca es pedir inspeccionar un sitio de aprovechamiento. El área de conservación también se verifica ya que su fauna y su flora se monitorean y estudian con fines de investigación.

En el primer sitio de aprovechamiento, Frank verifica que no se haya tocado ninguna de las especies de árboles preservadas. Frank se asegura también que los diámetros de los árboles aprovechados respeten la norma FSC: no menos de 25 milímetros y no más de 180. El sitio sujeto a aprovechamiento debe limpiarse de madera muerta. Unos metros más lejos, dos hornos y unos cuantos montones de carbón ya quemado descansan en el suelo. Frank examina el carbón que ya se produjo para verificar no solo los tamaños de los trozos, sino también su color, con el fin de garantizar que no hayan sido quemados en exceso. Asimismo, Frank lanza un trozo de carbón al montón. El carbón emite un leve tintineo, prueba de que se trata de carbón de buena calidad.

Después de esta inspección de campo, el grupo conduce de regreso al corral de ganado. Ahí, Frank visita la vivienda de los trabajadores del carbón. Según las reglas del FSC, a los trabajadores se les debe proporcionar una vivienda digna con acceso a agua y servicios sanitarios. Las chozas son pequeñas pero las instalaciones cumplen los requisitos y proporcionan una protección adecuada del sol y de la lluvia, así como agua potable, servicios sanitarios y electricidad.

Rodeados de arbustos, con ocho trabajadores silenciosos sentados a la sombra de un árbol de Marula, Frank inicia la capacitación. Algunos de los trabajadores están ausentes, con licencia o no han regresado del norte. Aunque el aprovechamiento del carbón se considera un buen trabajo, Gideon tiene dificultad en conseguir trabajadores permanentes ya que la mayoría son inmigrantes y no siempre regresan. Frank tiene que acudir periódicamente a capacitar al personal nuevo.

Frank muestra las cuatro distintas especies de árboles que pueden aprovecharse, con pequeños troncos de cada una de las especies acomodados en su mesa de plástico. Todas las demás especies están protegidas y no pueden tocarse. Luego explica otra vez cómo medir los espinos que pueden recolectarse a mano o con una herramienta. También detalla el equipo de seguridad que cada trabajador debe ponerse antes de dar las reglas sobre los animales que no se deben cazar, lastimar o matar. La lista de especies protegidas se distribuye y cada trabajador firma una lista de asistencia a la sesión de capacitación.

Sin embargo, ¡la inspección todavía no concluye! A Frank aun le falta revisar libros contables, carpetas con todos los permisos y demás documentación. Frank se sienta a la mesa en la casa con Gideon y ambos dedican alrededor de dos horas a revisar todo el papeleo.

Gideon se siente optimista al terminar el día y espera tener validada su certificación FSC. Estar certificado asegura que venderá todo su carbón. En Europa, la demanda de carbón certificado FSC proveniente de Namibia está creciendo ya que se sabe que se trata del carbón más ecológicamente producido del mundo. En este caso no hay deforestación. Por el contrario, el aprovechamiento de arbustos y árboles invasores ayuda a restaurar los valores ecológicos originales del suelo. El aclareo igualmente ayuda a que los animales salvajes deambulen libremente en la estepa y evita incendios. Se crean empleos y el medioambiente se preserva. El carbón proveniente de arbustos invasores es una situación en la que todos ganan y Gideon está contento de formar parte de esta empresa.